Bienvenidos a la experiencia económica

Autores: Marta Gallardo, Pablo Toré y Pedro Martín Núñez.

(Marta Gallardo, Pablo Toré y Pedro Martín
exponiendo en clase un artículo sobre la
experiencia).

Primeramente podríamos preguntarnos cómo ha cambiado la economía, ya que como se ha explicado en la exposición con el tema de las tartas, hemos pasado de comprar los ingredientes de la tarta para hacerla, a que la tarta sea lo menos importante.¿Y qué será ahora lo más importante? El servicio, ya que es muy difícil diferenciarnos por el producto en sí, por la similitud que existe entre los productos de una misma gama. Ahora encontramos locales para celebrar cumpleaños donde la tarta es lo menos importante (te la suelen regalar), es la experiencia que se vive, esa experiencia memorable que recordarás siempre. Esta experiencia ha pasado de servicios a escenarios, de productos a servicios y de clientes a participes.

Además de todo esto, anteriormente, solo se concebía la experiencia en los servicios como algo implícito del sector del entretenimiento, por suerte, en la actualidad no es así, se quiere que cada servicio que se le da a un cliente se una experiencia memorable.

Hablando en términos monetarios, en la actualidad, no se puede unir el término experiencia a un precio caro, ya que, existen experiencias gratuitas, como por ejemplo una tienda Disney y otros lugares donde una experiencia memorable no representa un coste económico mayor. Que haya empresas que aún no cobren por la experiencia vivida demuestra lo inmaduro del mercado en la actualidad y deben de asimilar una transición entre venta de servicios y venta de experiencia, con un derecho de admisión que cobre por vivir esa experiencia única.

Pero ahí no queda todo, además, para que esa experiencia sea memorable deberá de poner en práctica una serie de requisitos, como hacer al cliente partícipe de la experiencia. Pero nunca debemos olvidar que esta experiencia debe de satisfacer una necesidad en los clientes y deben darle la misma importancia en diseñarla de la que le dan al diseño de los productos.

Pero para crear una experiencia memorable tienes que tener en cuenta cinco grandes principios o bloques:

1. Con solo oír el nombre, el cliente debe de relacionarlo o suponer que va a vivir una experiencia única e irrepetible. Un ejemplo puede ser el oír el nombre de Hard Rock Café.
2. Armonizar las impresiones con señales positivas, reforzar ese concepto de experiencia única que se va a vivir. Como por ejemplo puede ser aderezar el “su mesa está lista” con un “Su aventura está a punto de comenzar” que no haría más que reforzar el concepto de servicio como experiencia
3. Eliminar señales negativas es también un principio importante, un claro ejemplo son las papeleras del McDonalds, tenemos que eliminar el concepto negativo que supone no tener camareros recogiendo las bandejas.
4. Otro punto sería el mix de objetos de interés, que no es más que tangibilizar la experiencia con un objeto de recuerdo,  por ejemplo, en los conciertos de los Rolling Stone por un suplemento al precio de la entrada te llevas una camiseta con la fecha y la ciudad donde ha tenido lugar el concierto
5. El último punto y no por ello el menos importante, sería el de involucrar a todos los sentidos en la experiencia, no todo se puede basar a en un sentido solo, hay que saber involucrarlos a todos con olores, sabores, colores, etc…

Por último pongo una frase del cinco veces ganador del anillo de la NBA, Pat Riley:

 “Entrena duro, juega duro y tendrás alguna posibilidad de ganar”

Aplicado a esto último, podemos decir que aplicar todos los pasos  no quiere decir que vayamos a triunfar y los clientes se peguen por entrar a vivir la experiencia que proponemos, pero si estaremos más cerca de este triunfo.